martes, 9 de junio de 2015

¿Internet y las redes sociales, mito o realidad para acabar con la hegemonía social, económica y política?

Por Jenny Rocío Salinas Atuesta
      
Cuando el mundo entero pensaba que Internet era la tierra prometida de la democratización y del cambio porque todo mundo podía publicar, vemos que eso no es así. Internet es mucho más elitista que los medios masivos tradicionales de comunicación; internet es el lugar donde más se siguen marcando las diferencias entre las clases sociales pobres y ricas. ¡Internet le da más poder a los que tienen poder! Un usuario común y corriente no tiene más de 200 seguidores en redes sociales mientras que los medios más influyentes de este país sobrepasan los 10 millones de seguidores.

Quienes más ganan dinero con el uso de internet son los poderes económicos y políticos que promueven imágenes y mercados obteniendo beneficios y gran rentabilidad, a través de aplicaciones exclusivas a las que no pude acceder una pequeña o mediana empresa.

En el tema de la conectividad, está comprobado que hay más conexiones en una isla como Manhattan en Estados Unidos que en todo el norte de África.   En cuanto al uso hay una gran mayoría de la población que no tienen las mismas oportunidades de aprovechamiento por no tener recursos económicos. Mientras que unos lo usan para colocar cosas en Facebook, los que tienen dinero utilizan internet para administrar los servicios de la empresa.

Discriminación en la prestación del servicio de internet en Colombia. Las regiones más pobres son las menos beneficiadas.

Tiene toda la razón el analista e investigador de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, Nicola Stornelli García, en su publicación del Diario económico de mayor importancia en Colombia, Portafolio, intitulado: “un internet para ricos, otro para pobres” cuando afirma que la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), propone un trato discriminatorio y desigual para las regiones más pobres, cuando planea un ancho de banda diferenciado para las regiones de menor desarrollo económico del país.

Stornelli García, señala en su análisis publicado en la página: https://www.portafolio.co/opinion/nicola-stornelli-garcia/un-internet-para-ricos-otro-para-pobres-analisis-portafolio-28-de-febrero-de-2017-503748  que permitir que se ofrezca un internet de menor calidad en ciertas regiones colombianas, es igual de ofensivo a decir que en Buenaventura pueden ofrecer agua de mala calidad.

Estamos en la era de la información, que nos debe permitir el paso a la era del conocimiento.  Se habla de la economía del conocimiento y del reconocimiento del mismo como un activo de mucho valor de los países y empresas. Y es internet la que ha propiciado el advenimiento a estas nuevas eras. Decir que en Maní (Casanare) no merecen un internet de banda ancha de calidad, es por lo menos, decir que están condenados a la ignorancia.

La propuesta la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), en la que se vislumbra un trato discriminatorio en cobertura y ancho de banda  para las regiones más pobres, se encuentra publicada en la página https://www.crcom.gov.co/recursos_user/2016/Actividades_regulatorias/ain_ba/30dic/DocSoporteBA12-2016.pdf bajo el nombre de “definición de banda ancha para Colombia. Ya hay un proyecto de resolución que mantiene la horrible discriminación del documento soporte, indica Stornelli.

El analista, reveló de otro lado que a esta problemática se suma la deficiencia en la prestación de todos los servicios de telefonía celular en algunas regiones del país, como en San Diego Cesar, desde donde ha solicitado hace más de seis años a Telefónica que instale el servicio de ADSL y no lo han hecho, y eso que por ahí pasa la fibra óptica de Tv Azteca y la Nación.   (ADSL es una tecnología de acceso a Internet de banda ancha, con una velocidad superior a una conexión por módem en la transferencia de datos, para mejorar la calidad de voz y video llamadas). Recuperado de: https://es.wikipedia.org/wiki/L%C3%ADnea_de_abonado_digital_asim%C3%A9trica

La provincia no tiene derecho a conocer Netflix ni a disfrutar de video llamadas de calidad, por mencionar dos cosas. ¿O ustedes creen, amables lectores, que con la banda ancha móvil podemos ver House of Cards o hablar con el hermano que vive en España?

En el artículo ‘Más allá de la brecha digital: la apropiación social de las TIC como opción para la inclusión’ escrito por Catalina Escobar, Ana Isabel Restrepo y Andrés Castrillón para el documento ‘Equidad e Inclusión Social’ de la OEA dice: “además, según el Departamento de Estado de los Estados Unidos, muchas de las personas que cuentan con algún tipo de acceso a internet, están limitadas al uso de servicios móviles costosos que carecen de la calidad y utilidad de la banda ancha de alta velocidad (DipNote, 2016).

Por lo tanto, muchas de las personas más pobres del mundo están excluidas de los beneficios de la conectividad fiable, asequible, incluyendo el acceso a las herramientas clave que apoyan a diversos sectores, desde la asistencia sanitaria a la educación, así como empresarios y pequeñas empresas”.

Esta problemática se inscribe en la teoría crítica que ve a los medios de comunicación como elementos en manos de las clases sociales altas que siguen ejerciendo poder sobre las clases sociales bajas.  Las clases sociales altas utilizan los medios de comunicación para continuar adormeciendo al pueblo.  Internet es el medio más elitista donde se siguen marcando ampliamente las diferencias sociales.

Artículo actualizado: Junio de 2017.